Teresa Flecha, quien denunció al titular del Congreso, Silvio Ovelar, por la contratación de su hijo en la Cámara de Diputados, no descartó que las denuncias puedan ampliarse.
La demandante apuntó a la responsabilidad del presidente de Diputados Raúl Latorre, que se puede tipificar en el artículo 192 del Código Procesal Penal, que habla sobre la lesión de confianza, al ser administrador y haber realizado el nombramiento de forma desprolija.
“Más que evidente es que utilizaron la figura de asesor para darle un carguito al hijo de Silvio Ovelar. Eso es una burla y una bofetada a la ciudadanía”, según dijo.
Para Flecha, todos los legisladores cuyos parientes fueron nombrados, cometieron nepotismo, pero reiteró que solo el tráfico de influencia tiene carácter penal. Aunque enfatizó que si hubo pedido por parte de los mismos, también podría configurarse tráfico de influencia.
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