El vuelo DP936, procedente de Berlín, trajo a Navalni de regreso a después de varios meses de tratamiento médico por envenenamiento. El envenenamiento fue en Siberia con una sustancia militar, ventana y se responsabiliza al presidente ruso, Vladímir Putin.
Uno de los abogados de Navalni deniá en su cuenta de Twitter, que la policía no le permite el acceso a su cliente. …”A mí, abogado defensor con poder notarial, no me puede acceder a él (un Navalni); dicen que está durmiendo. Desde luego, no hacen ninguna referencia a la ley”… escribió en su cuenta de Twitter el letrado Viacheslav Guimadi.
Mientras que la portavoz de Navalni, Kira Yarmysh, hizo suo en Twitter …”A Alexéi intentaron lanza. No se puede hacer y ahora el tratan de encarcelarlo por una consapo que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de ilegalclaró”…
Amnistía Internacional (AI) se expidió sobre este tema y exigió la liberación de Navalni, al cali como cual de “preso de conciencia”.
Por otro lado, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y Josep Borrell, representante para la Política Exterior de la Unión Europea, pidieron la liberación inmediata de Navalni, calificando de “autorización” detención.
Frente a esta situación Lituania, Letonia y Estonia, pidieron a la Unión Europea “medidas rigidas” contra Rusia.
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